sábado, 19 de abril de 2008

Ricardo

Ayer me quedé corta, cuando mencioné un taxista. Era un caballero amante de la luna. Un poeta que en su vaivén de rondas obligadas conoce el mundo y todo lo observa. El Sr. Ricardo es alegría hecha persona, es... un mago. Tenía en el bolsillos las palabas que no sabía necesitaba esa noche. Dos palabras y reubicó lo que había descuajeringado en mí. Un par de palabras más y no podía menos que sonreír. Ricardo, no puedo menos que agradecerle.

Fue una presencia que comienzo a dudar haya sido real. Me desperté hoy con la duda en el bolsillo, pero lo palpé y encontré un papelito y en él una dirección de mail, de un tal Ricardo. Un nuevo amigo entre letras. Otro Caballero andante de palabras lunares.

Gente asombrosa, charlas fantásticas, paisajes surrealistas... Debe ser una fase lunar extraña, espero que no termine.

3 comentarios:

nachingal dijo...

muy bueno nena!
donde nosotros pasamos, vos ponés la atención y te llevas el premio mayor.
besote.
fue una buena noche.
nos tendríamos q juntar x las tardes, asi no estamos tan cansados
(somos gente mayor)
un beso

bensonita dijo...

qué dice?! si apenas somos niños! Es cosa de niños jugar y cansarse por ello :) Sí tenemos que juntarnos por la tarde, pero sólo para ver el amanecer de la noche. Mi próxima entrada será su retrato en letras, me comprometo.
Y gracias!

Anónimo dijo...

te extraño!
pronto estoy de vuelta ...